Raúl Eduardo Martínez
Profesor en Educación Física.
Profesor Adjunto de la Cátedra de Básquetbol F.A.C.D.E.F._ U.N.T.
Colaboradores en recolección de datos:
Profesor Augusto Palomino, Profesor Eduardo Palomino y alumnos de la Cátedra de Básquetbol de la F.A.C.D.E.F._U.N.T.
E-mail: raulmartineztuc@hotmail.com
Resumen
Investigación realizada en la Facultad de Educación Física de la Universidad Nacional de Tucumán para tratar de identificar las posibles causas por las que los jóvenes deportistas abandonan la práctica del básquetbol en su período de formación. Se trabajó con encuestas de ítems abiertos y cerrados a gente relacionada con el ambiente del básquetbol que fueron procesadas estadísticamente; luego de obtener los resultados se plantearon posibles estrategias para ver si se logran modificar las condiciones que generaron el problema.
Palabras claves
Básquetbol, deserción, categorías formativas
INTRODUCCION.
Quien quiera iniciarse en el baloncesto deberá saber que es uno de los deportes de aprendizajes técnicos más complejos. Esto es así, no sólo por la dificultad del dominio de sus técnicas sino por el gran número de reglas que posee. Por tales características, el aprendizaje en la fase inicial, requiere de dedicación en tiempo y de una espera paciente para el logro de su dominio.
La mayoría de los investigadores del aprendizaje de destrezas motoras coinciden en decir que el momento más adecuado para que una persona desarrolle sus facultades es el comprendido entre los 8 y los 12 años, un tiempo que bien puede ubicarse entre la infancia y la pubertad. Sin embargo, lo cierto es que cualquier edad es buena para empezar a aprender un deporte si se hace con empeño y deseo definido. Pero, por cierto que no son estas las únicas variables que determinarán la permanencia en un deporte, sino que el jugador deberá apoyarse en otros factores, externos a sí mismo ya que dependerá de técnicos, dirigentes, padres, u otras personas o situaciones ajenas a sus decisiones. Y lo importante aquí es considerar que estos factores no funcionan de manera independiente; si así fuese, podrían reforzarse unos sobre otros cuando algunos de ellos se encuentran debilitados o ausentes.
Si el equipo que guía al jugador y él mismo, no coordinan sus acciones de la mejor manera, complementándose o sumando sus efectos, es posible que todo el esfuerzo se dirija al fracaso e inclusive, que el jugador abandone antes de cumplir su meta.
La repetición de estas resultantes, ha generado la necesidad de investigar esta problemática definiéndola por su importancia, como la deserción de jugadores federados en las categorías formativas pertenecientes a la Asociación Tucumana de Básquetbol.
A un equipo que fracasa repetidamente se le puede hacer un seguimiento de sus tácticas y técnicas de juego registradas en su historial; pero un equipo que pierde a sus jugadores, está hablando de un factor no visible, que está incidiendo, no sólo en la expectativa de triunfo de sus integrantes, sino en el ánimo de sostenerse como parte del equipo. Esta deserción, no sólo genera sensaciones desagradables de fracaso a una edad muy temprana en los jóvenes, sino una serie de desventajas deportivas y socioculturales.
El abandono temprano imposibilita la detección de futuros talentos, y si los alcanzara a detectar antes de perderlos, no puede hacerlos crecer; además, quita al Básquetbol la oportunidad de funcionar como un agente promotor de la salud, de la socialización y de la recreación.
Por otro lado, esta deserción priva al club la posibilidad de funcionar como instrumento de contención social, en especial en una época en la cual la actividad física sistemática se convierte en aspectos preventivos que propone a los niños una salida ajena al ocio, conductor las mas de las veces de un camino a males mayores como la bebida o la droga.
Por ello y asumiendo el rol que nos compete como docentes de la Universidad Nacional de Tucumán, es que se decide investigar este problema con el propósito de aportar, primero claridad sobre su real situación y luego, algún intento de solución al mismo.
Si bien en la actualidad no existen estudios sobre el tema en nuestra provincia, está la clara percepción del problema por los dirigentes, técnicos, jugadores y amantes del Básquetbol que observan con un alto grado de preocupación el hecho.
Tampoco hay publicaciones que puedan abordar esta realidad, ya que tanto la bibliografía general de los deportes, como la específica del Básquetbol, desarrollan en profundidad temas como las técnicas, tácticas, entrenamientos, metodologías del aprendizaje, etc. y muy poco sobre las estrategias de permanencia de los deportistas en sus periodos de formación.
Los textos de educación física en general refieren a este tema ubicándolo fundamentalmente dentro de las teorías de la motivación, sin embargo no existen estudios que refieran al problema de la desmotivación y sus causales, lo que pareciera ser el punto de cuestión dentro de esta problemática.
La generalidad de los teóricos mas importantes del deporte, desde José Maria Cagigal (1966) que adscribe al humanismo, hasta Kurt Meinel y Ghunter Schnabel (1988) desde la teoría de la información, o la línea técnica pedagógica de Erwin Hahn (1988), de Jürgen Weinneck (1988), en general destacan a la motivación como variable fundamental para que los deportistas conserven el interés por sus elecciones.
Todos sabemos que el ser humano, conformado por dimensiones integradas transformadas en conductas, suele destacarse más sobre una u otra dimensión según las influencias recibidas por su contexto familiar y sociocultural. Cuando el medio le es favorable, no solo se acoge a él y lo adopta sino que, tal beneficio le estimula para permanecer en el mismo espacio mejorándolo y superándose permanentemente.
En los casos en los que el medio le es hostil o aún indiferente, el ser humano tiende a alejarse del mismo o al menos subsistir en el mismo sin mayores intercambios.
El deportista no es ajeno a estas manifestaciones de la conducta por lo que, ante el abandono de los espacios elegidos, es posible suponer que este ámbito no ha cumplido con las condiciones que le favorezcan la estabilidad y mucho menos su evolución.
OBJETIVOS
- Identificar las causas por las que los deportistas federados de básquetbol en Tucumán, abandonan la práctica antes de haber transcurrido su periodo de formación.
- Determinar cuáles de ellas son las que afectan de forma más frecuente y directa en estas conductas.
- Planear posibles estrategias de modificación de las condiciones que han generado el problema.
METODOLOGIA
La metodología empleada fue el análisis de la situación a través del resultado de entrevistas y encuestas a ex-jugadores, jugadores en actividad, algunos técnicos de divisiones formativas y algunos jóvenes dirigentes que hasta no hace mucho tiempo atrás habían sido jugadores.
Las preguntas utilizadas en las encuestas fueron seleccionadas después de realizar entrevistas informales con jóvenes ex- jugadores y sus respuestas han conducido a determinar los factores que se nombran a continuación como prioritarios.
Las encuestas fueron realizadas por profesores, seminaristas y alumnos de la cátedra de Básquetbol de la F.A.C.D.E.F. que actuaron como operadores en la recolección de datos.
La cantidad de personas encuestadas fue de 97 y se trató de indagar cuales fueron las causales de las deserciones de los jóvenes deportistas.
Las posibilidades que se les presentó como tales fueron:
- Discrepancias con el grupo
- Discrepancias con el entrenador
- Los entrenamientos no eran buenos
- Otra actividad más atractiva
- No tener lugar en el equipo y jugar poco tiempo 5) La competencia no era interesante
RESULTADOS DE LA ENCUESTA
En este grafico podemos observar q en el eje x se encuentra el número de casos (sujetos entrevistados) y sobre el eje de las y las preguntas realizadas a estas personas, lo cual nos da como resultado la siguiente referencia:
Pregunta Nº de sujetos % por ciento
1 22 22.6
2 24 24.7
3 9 9.2
4 5 5.1
5 31 31.9
6 6 6.1
CONCLUSIONES
Las respuestas de los sujetos entrevistados se focalizan en un 80% en tres temas:
1- Discrepancias con el grupo (22.6%)
2- Discrepancia con el entrenador. (24.7%)
5- No tener lugar en el equipo y jugar poco tiempo (31.9%)
Esta lectura nos hace reflexionar sobre cuáles serán las estrategias para revertir esta tendencia.
Con respecto a la respuesta 1- Discrepancias con el grupo (22.6%): Como posible solución citare un trabajo de Sánchez Sánchez (2007).”En los equipos suelen formarse pequeños grupos que se diferencian entre sí porque sostienen distintas formas de tratarse, distintas culturas o distintos objetivos.
Aunque parezca inapropiado, en los grupos en formación, no todos los niños buscan el mismo objetivo, varían desde la búsqueda de un refuerzo en su autoestima hasta demostrar a sus pares que son mejores y hasta usar el deporte como una actividad pasatista más agradable que estar en sus casas.
En estos subgrupos hay posiciones encontradas, mientras unos proponen aceptarlas para aprovechar su influencia, otros colocan todos su esfuerzo en romperlos para formar un solo grupo; en definitiva lo que polariza es que unos consideran a los subgrupos como un componente para generar competitividad intergrupal positiva y otros como una división que se vuelve negativa a la hora de necesitar unirse ante una misma meta.
El autor plantea la necesidad de evitar el conflicto de intereses entre los objetivos individuales y los del grupo, y considera que es fundamental que a los niños se les genere un grado de autonomía que le permita hacer valer sus sistemas de valores y así lograr que aprendan a respetar a los demás”.
Por lo expresado la solución solo es posible si existe a la cabeza de un grupo un entrenador formado en el conocimiento de la psicología deportiva infantil en lo mínimo indispensable como para saber guiar, contener e incentivar a los niños a la búsqueda de objetivos comunes, algo que precisa de conocimientos pedagógicos y mucha prudencia a la hora de reaccionar ante las diferencias de los miembros de un grupo.
En los niños en formación la elección del deporte todavía no es definitiva, y una actitud de rechazo de sus pares avalada por la complacencia del entrenador es suficiente para que estos niños se pierdan en el deporte.
Estimo que las causales que manifiesta la respuesta 2-Discrepancias con el entrenador (24.7%) se vincula a el perfil de los técnicos de divisiones formativas.
En este caso, los jóvenes han expresado situaciones verdaderamente preocupantes ya que en algunos casos los entrenadores no propiciaban un espacio agradable para la práctica del deporte por ejemplo la falta de respeto en algún llamado de atención con cierto grado de violencia, o donde algunos jóvenes parecían tener privilegios sobre otros. Esto nos hace reflexionar que un entrenador formador de niños y jóvenes, no puede olvidar que la etapa de la infancia y aún más, la adolescencia, es un tiempo fundamental para la formación de su personalidad.
El niño en estas edades, tiene necesidad de una figura paterna que le muestre autoridad, respeto por su persona y normas claras de relación. El entrenador debe ser la prolongación de la formación familiar y el juego no se centra sólo en las relaciones de perdedores y de ganadores sino también en la limpieza y ecuanimidad con que los adultos manejan estas situaciones.
Para resolver este problema seria conveniente que los entrenadores realicen cursos de perfeccionamiento y capacitación, particularmente en los aspectos pedagógicos y psicológicos, que parecen ser las mayores debilidades.
Con respecto al ítem 5- no tener lugar en el equipo y jugar poco tiempo (31.9%) Podemos analizar en este aspecto el reglamento la Asociación Tucumana de Básquetbol que permite presentar un solo equipo por categoría y algunos clubes poseen el numero de niños y jóvenes suficientes como para formar dos planteles (Ej: Belgrano A y Belgrano B).
Seria interesante ver la posibilidad de modificar esta reglamentación la cual permitiría competir mas asiduamente ya que ante la situación de tener que presentar un solo equipo algunos entrenadores hacen rotar a sus jugadores (juegan un partido y al siguiente quedan afuera) o sea que compiten cada dos semanas y en algunos casos cada tres semanas ya que las divisiones formativas juegan los días sábados.
Los entrenadores en las categorías infantiles (formativa-competitiva) y cadetes (competitiva-formativa) hacen jugar siempre a los más hábiles y esto no permite reforzar la autoestima de los que quedan sin competir lo cual los hace buscar otras actividades
Por ultimo y a modo de reflexión también se observó que existe cierta falta de identidad y pertenencia con el club (los jugadores se cambian con muchas frecuencias de club); en este punto habría que reflexionar sobre cuales son las estrategias de los clubes para desarrollar la identidad con la institución y el deporte.
BIBLIOGRAFIA
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Nuria Puyol y Foyo. 1999- Curso de Entrenamiento de Baloncesto Ed. De Vecchi.
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Asociación Vasca de Entrenamiento de Baloncesto- 1999. “Programa Técnico para la iniciación al Baloncesto”.
Cagigal, José Maria-1966. Deporte, pedagogía y humanismo. Publicaciones del comité Olímpico Español. Madrid.
Hahn, Erwin.1988. Entrenamiento con niños. Ed. Martínez Roca. Barcelona.
Meinel, y Schnabel 1988. Teoria del Movimiento. Ed. Stadium Bs As.
Weineck, Jurgen 1988. El Entrenamiento Óptimo. Ed. Hispano Europea. Barcelona.
Sánchez Sánchez, Francisco, 2007. Seminario de Nuevas tendencias de entrenamiento y competición en deportes de equipo. Aspectos psicosociales