Se calcula que en nuestro país hay casi tres millones de diabéticos, la mitad sin diagnosticar.
Unos 30.000 enfermos son niños.
Mañana se celebra el día mundial contra esta enfermedad.
En España, casi tres millones de personas padecen diabetes, una enfermedad que constituye la sexta causa de mortalidad en nuestro país y el primer motivo de ceguera y de tratamiento renal sustitutivo (diálisis, trasplante...) en países desarrollados.
Sin embargo, casi la mitad de estos diabéticos no saben que lo son, un dato que resulta alarmante si se considera que un diagnóstico precoz es fundamental a la hora de controlar la enfermedad y sus efectos.
La incidencia de la diabetes en España va en aumento, de manera que sólo en los últimos 10 años se ha incrementado en un 30%. "Es una brutalidad", afirmó al respecto el presidente de la Federación Española de Diabetes, José Antonio Vázquez, en el marco de la celebración del día mundial de la enfermedad, que tiene lugar mañana.
300 millones en 2025
Según la Organización Mundial de la Salud, en el mundo hay 180 millones de diabéticos, una cifra que se incrementará hasta los 300 millones en 2025.
Estas previsiones de crecimiento son más que alarmantes, sobre todo si se tiene en cuenta que la diabetes de tipo 2, que en España afecta al 90% de quienes padecen esta dolencia, está directamente relacionada con factores como la obesidad, el sedentarismo, la edad avanzada y los malos hábitos alimenticios. "Son bombas de relojería", afirmó Vázquez, quien incidió en que el tipo de vida actual en los países desarrollados favorece que se dé esta combinación tan explosiva.
Variante prevenible
La diabetes del tipo 2 es, además, la única que se puede prevenir, ya que en la de tipo 1, que viene determinada por factores genéticos, no hay prevención posible. Esta última afecta en España a unas 120.000 personas, de las que aproximadamente 30.000 son menores de 15 años.
En cuanto al tratamiento, desde la Federación Española de Diabetes se hace hincapié en que se trata de una enfermedad crónica para la que aún no hay cura y sobre la que hay que tener un control constante.
En este sentido, el Instituto de Estudios Médicos Científicos (INESME) denunció que, según su último informe, el 90% de los médicos de familia desconoce la Estrategia en Diabetes del Sistema Nacional de Salud, aprobada en octubre de 2006.
Los pacientes, por su parte, se quejan de las largas listas de espera, reclaman más visitas a los especialistas, un tratamiento más personalizado y un mejor acceso a los materiales necesarios para autocontrolar la enfermedad.
Padre de un bebé afectado
Andoni Lorenzo. Presidente de la Asociación de Diabetes de Álava, 41 años.
"Es una enfermedad muy dura"
Cuando a mi hija le diagnosticaron diabetes tenía 16 meses; era sólo una lactante. Mi mujer detectó que orinaba mucho y de repente alguien te dice que tienes que pincharla con una jeringuilla varias veces al día.
Fue un shock, crees que es una pesadilla y que se han equivocado. Luego descubres que es una enfermedad muy dura y muy seria, porque, al ser una niña tan pequeña, tienes que estar todo el día pendiente y hacer continuos controles del nivel de glucosa (azúcar).
Por las noches, después del biberón hay que ponerle la insulina que tú crees que es necesaria, y siempre te vas a la cama con la psicosis de si habrás acertado. Además, tienes que levantarte de madrugada para hacer más controles.
Hay que elaborar comidas especiales, estar pendiente de la medicación, ir al colegio y explicárselo todo a los profesores... Son tantos los cuidados necesarios que mi mujer tuvo que dejar de trabajar, algo que sucede en el 90% de los casos. Los padres somos los que más sufrimos, por eso muchos acaban en el psicólogo.