“Para ser un buen torero, antes hay que ser un buen toro”.
Anónimo
“La tarea de toda organización deportiva, no es sólo concentrarse en que le compren el producto, sino en crear una relación de lealtad en el tiempo”
Para servir al mercado deportivo, debemos conocer y entender nuestro mercado como a sus potenciales consumidores. El producto deporte es complejo, su demanda puede responder tanto a un estado de liberación del consumidor (benji), razones de salud (reducción de grasa), como un medio para afirmar la identidad personal (ser parte de un grupo deportivo) y, finalmente, para poseer objetos de valor (esquí, yates, membrecía en un club, etc.).
En un mercado tan complejo en su demanda, exigente, globalizado y competitivo es necesario que las organizaciones deportivas, sean estas con o sin fines de lucro, reconozcan las verdaderas necesidades y requerimientos de su mercado -estén orientadas al mercado, no al producto-, y que sus directores sean creativos en la comercialización, trasciendan a lo ordinario. El futuro pertenece a aquellos que ven posibilidades, son creativos y capitalizan las oportunidades que ofrece el mercado.
El mercado del deporte está en crecimiento, por consiguiente, las organizaciones deportivas están obligadas a organizarse de forma creativa tanto en los productos que ofrece como en su gestión y desarrollo de su personal, sólo así podrán capitalizar las múltiples oportunidades que ofrece la industria del deporte, que está en constante crecimiento.
Qué se entiende por mercado
Desde un punto de vista comercial y de marketing, se entiende por mercado al “set de individuos y organizaciones que son actuales o potenciales adquirentes de un producto tangible o un servicio”.
Nos indica el concepto que mercado comprende tanto las organizaciones, como ser todas aquellas que son de interés para la organización deportiva, proveedores, instituciones financieras, organizaciones comunales y tantas otras, como las personas naturales, hinchas, socios, espectadores, entrenadores, psicólogos deportivos y otros.
Lo importante es mantener y preocuparse de los actuales consumidores y clientes de la organización, y también, de todos aquellos que nos interesa que sean nuevos adquirentes de nuestros productos. Para ello debemos dar al mercado lo que quiere y así retener al consumidor.
Para crear y retener al cliente, se tienen que hacer aquellas cosas y acciones que la gente quiera hacer para hacer negocio.
El compromiso por tanto de la organización deportiva, de sus directores es conocer su mercado, para ello es necesario contestar las siguientes preguntas:
1. ¿Quién está en el mercado? Sus ocupantes. El mercado deportivo es universal y su segmentación transversal, igual para la práctica de un deporte, ejemplo Tenis, se debe segmentar según se trate de edad, ingresos, estatus, educación, gustos y otros.
2. ¿Qué compra el mercado? ¿Qué objetos está comprando? Adquiere productos no durables (pelotas de tenis), durables (para varios usos, como la raqueta) y servicio o intangible (las clases de tenis con un profesor de alto rendimiento).
3. ¿Cuándo compra el mercado? Oportunidad de su compra, varía según las condiciones económicas, interés por el producto y razones climáticas.
4. ¿Quién participa en la compra? ¿Quién influye en la compra? Existen varias influencias en el proceso de compra: El iniciador, quien sugiere o influye en la compra, induce a probar un producto nuevo, asistir a un evento deportivo; el influyente, quien implícitamente influye y encamina la compra (el padre hacia el hijo para asistir a un evento deportivo); el decidor, quien determina la compra (“me voy al estadio”); el comprador, quien efectivamente hace la compra (el padre que compra las entradas); y finalmente, quien lo usa, quien lo consume cuando se asiste al evento.
5. ¿Por qué el mercado compra? El objetivo de su compra, es para satisfacer una variedad de necesidades, psicológicas, sociales, estatus, etc.