Ayer jugaron River y Boca la final más importante de la historia del fútbol argentino. Mi intención es analizar – desde el punto de vista de la teoría del entrenamiento deportivo, con los conocimientos que me dio la Educación Física y mi experiencia como entrenador – las causas por las cuales Boca tuvo 4 lesiones y River ninguna.
No es muy frecuente que un equipo deportivo de 11 jugadores tenga 4 lesiones y deban ser reemplazados 3 y el restante abandonar el campo de juego. Es un porcentaje altísimo, casi el 40%.
Antes de adentrarme en las causas concretas de tal hecho, quiero hablar sobre el tema de la flexibilidad, que no es la causa principal sobre lo que pasó ayer pero quiero mencionarlo a modo introductorio. Ya la flexibilidad es una cualidad física que disminuye significativamente el riesgo de lesiones.
Hace 20 años escribí un texto titulado “Flexibilidad para todos” que se puede descargar gratuitamente desde www.portalfitness.com donde expresaba lo siguiente:
Durante años la flexibilidad fue concebida como una disciplina menor, poco varonil, calificándola como “cosa de niños y damas”; Como bien es sabido, el entrenamiento de la condición física antiguamente estaba a cargo de las escuelas militares y tenía una concepción de “preparación para el combate”, en ese ámbito castrense donde los cimientos de la educación se sostenían sobre los pilares del coraje, la valentía, la fortaleza mental etc., era lógico que una técnica de relajación muscular no tuviera cabida.
A partir del siglo XX, con la demostración científica sobre la importancia de sus beneficios, fueron paulatinamente incorporadas por diversos deportes y, gracias al aporte de la medicina y la fisioterapia, fueron recomendados para personas sedentarias, no deportistas.
Hoy en día aun existe gran recelo en diversas áreas deportivas, en lo que concierne a su entrenamiento y sobre todo, en aquellas disciplinas que la han adoptado, todavía no le dedican el tiempo de entrenamiento que ésta realmente merece, y más triste aún, es que en estos tiempos todavía escuchamos por los pasillos de los clubes e instituciones deportivas a algunos entrenadores exclamar “No pierdan tanto tiempo realizando esos ejercicios y empiecen a entrenar en serio”; Como si el entrenamiento de la flexibilidad fuera una pérdida total de tiempo
Si bien hay deportes, como la gimnasia deportiva, que han logrado incorporarla y entrenarla en forma excepcional, existen un sinnúmero de deportes que siguen ignorándola y despreciando sus beneficios.
Realmente me asombra terrible la falta de flexibilidad que poseen la mayoría de los futbolistas (ejemplificando este deporte por ser el que más simpatizantes y seguidores posee), yo me pregunto, acaso los entrenadores y preparadores físicos de fútbol ¿no son conscientes de que, cuanto mayor nivel de flexibilidad posee un futbolista menor posibilidad de lesionarse tendrá?
El futbolista más flexible que conocí fue el mexicano Hugo Sánchez, la diferencia de flexibilidad entre este deportista y sus compañeros era realmente abismal, cuando lo veía precalentar y realizar diversos ejercicios de estiramiento se asemejaba más a una gimnasta que a un futbolista.
Hugo Sánchez fue el jugador del Real Madrid de España que menos se lesionó en la época que jugó en dicho club; En una entrevista periodística le preguntaron cuál era la razón por la cual nunca se había lesionado, a lo que respondió que su hermana era gimnasta y desde chico le había inculcado los beneficios del stretching enseñándole los diversos ejercicios y técnicas para entrenarlo y que esa era la razón fundamental de la ausencia de lesiones en su vida deportiva.
Pasaron 20 años y el tema no ha evolucionado mucho, yo diría que más bien poco. El fútbol es un deporte bastante machista. Es curioso que haya tantas mujeres fanáticas y apasionadas del fútbol y prácticamente ninguna en el cuerpo técnico, en las comisiones deportivas, etc. Por ejemplo en la actual comisión directiva de River, hay una sóla mujer, y se ocupa del área de “Comisión de la mujer”. Parece un chiste pero es algo real. En la comisión directiva de Boca no hay ninguna mujer. Aparentemente no existe el área de “Comisión de la mujer” en dicha institución.
Pero volviendo al tema. A pesar del cambio de paradigma en lo que concierne a la igualdad de géneros, la flexibilidad sigue considerándose como una cualidad física poco varonil y de menor importancia. Las chicas de los equipos deportivos femeninos tienen niveles mucho más altos de flexibilidad que sus pares varones y en las causas no sólo influye el factor genético que favorece a la mujer sino factores sociales y culturales.
La flexibilidad se entrena poco o casi nada desde las inferiores, basta ver un entrenamiento de niños de 6 años para observarlo. Los vemos correr, saltar, pero rara vez estirar. Incluso cuando observamos a futbolistas de primer nivel, calentar antes de entrar a un partido, podemos observar que estiran poco y cuando lo hacen muchas veces vemos que no lo hacen con una técnica correcta y no hace falta ser un entrenador para darse cuenta que muchos jugadores tienen menos flexibilidad que un tronco. Tampoco es necesario ser un preparador físico para darse cuenta al ver una gimnasta que maneja las técnicas de los ejercicios de stretching muchísimo mejor.
Los que venimos del mundo del atletismo, sabemos que los atletas, tanto varones como mujeres, desde antes de los 50 le dedicaban mucho tiempo al entrenamiento de la flexibilidad. Y si en las últimas décadas la flexibilidad ingresó en el ámbito del fútbol, aunque no de la forma que debería, es gracias al aporte de la Educación Física.
Yo estoy convencido que si el nivel de flexibilidad en los futbolistas fuera similar al de las gimnastas o la de una atleta de 110 con vallas, las lesiones serían muchísimos menores. Y podría serlo si las escuelitas de fútbol se trabajaran esta cualidad física como corresponde.
Dicho esto paso a analizar las causas por las que a mi entender Boca tuvo 4 lesionados y River ninguno.
Tal vez la falta de flexibilidad en un partido de tanta exigencia física y mental haya influido pero no es la causa principal a la que quiero referirme, ya que esa carencia es propia a ambos equipos y River terminó el partido entero y sin lesiones.
El entorno y la presión
Permítanme que retrase un poco más la respuesta a la pregunta del título de la nota y me explaye ahora sobre el estrés a los que estuvieron sometidos ambos equipos. Yo entiendo que en los tiempos que corren muchos lectores buscan respuestas telegráficas de no más de 140 caracteres. Pero me tendrán que disculpar ya que vengo de otra generación y como amante de la lectura lenta y pausada no tengo esa habilidad de expresarme con tan pocos vocablos, necesito elaborar un texto argumentativo con un marco teórico que justifique y avale mis posturas.
Ni Boca ni River querían jugar este partido. Este encuentro para el hincha fanático de River y Boca era el más importante de la historia. Tal vez sea complicado entender esta cuestión para quien no haya vivido en la argentina o no conozca la idiosincrasia futbolística de la orilla del sur del Río de la Plata. Pero puedo asegurar que cualquier hincha “fanático” de ambos equipos preferiría ganar este partido que la final del mundo con Alemania del 2014. Perder la final de la Copa Libertadores de América (aunque se jugara en la capital del Reino de España) significaba soportar las cargadas de por vida del eterno rival, perder una final del mundo no es algo dramático es más se festeja el segundo puesto.
Todos sabían que el ganador del partido quedaría en la historia y por ende el perdedor.
El partido tuvo paralizado al país semanas. Periodistas deportivos explicaban los nervios a los que estaban sometidos los hinchas de ambos equipos. Boca se jactaba de tener a River de hijo de llevarle 8 partidos y de ganarle los clásicos más importantes. River replicaba tener 8 campeonatos más, pero Boca argumentaba que era un equipo copero con 6 copas libertadores y de ganar ésta última alcanzar a Independiente, el actual rey de copas con 7 galardones.
Vemos algunas frases famosas pronunciadas años atrás:
"No sé por qué River no me compró, pero me hicieron un favor. Podía no haber jugado en el club más grande de Argentina. River no tiene pelotas para jugar finales". Cuando esta frase fue pronunciada, seguramente el autor no se imaginó que alguna vez ambos equipos jugarían una final de la Copa Libertadores de América. Y menos que tendría la responsabilidad de enfrentarla como técnico de Boca. El autor fue nada más ni nada menos que Guillermo Barros Squelotto. Una frase que con el devenir de la historia se tornaría muy desafortunada si Boca perdía este encuentro. Mucha presión para Guillermo.
"¿Sabés cuánto le falta a los jugadores de River para tener los huevos que tiene Boca?". Diego Armando Maradona. Esta frase no la voy a analizar, el Diego es inimputable. Es mucho más entretenido re vivir sus jugadas que escuchar los disparates que dice.
"River siempre arrugó en los Superclásicos más importantes de la historia". Hugo Orlando Gatti. Tampoco el ídolo de Boca se imaginó que algún día su equipo perdería la final más importante de la historia
Como el Pelado Díaz, en su etapa de técnico no podía ganar los clásicos se le ocurrió decir; "Boca gana partidos y River campeonatos. Si ellos no estuvieran, ¿cómo nos divertiríamos?". Pero lo cierto es que al Pelado, Boca lo tuvo de hijo.
En el contexto que estoy desarrollando, este partido representaba para muchos “El fin de la historia”, parafraseando al filósofo Francis Fukuyama. La frase pertenece al título de su libro donde expresa la idea que la historia termina con la caída de la URSS y el posicionamiento de las democracias liberales.
Si Boca ganaba esa final reforzaría su postura de considerarse el padre legítimo de River. Pero si ganaba River se terminaba la historia, River pasaría a ser el equipo con más campeonatos y con el triunfo del clásico más importante de la historia del fútbol argentino.
Así llegaban los jugadores a la final, con una presión y stress emocional superlativo.
Las causas de las lesiones
La pregunta en cuestión, desde el punto de vista del rendimiento deportivo, de la táctica y la estrategia, es a mí entender sumamente relevante. Si yo tengo 3 cambios tácticos y tú tienes 3 cambios obligados porque se te lesionan 3 jugadores, la diferencia deportiva es significativa. Tú cambias porque no te queda otra opción y yo cambio de acuerdo a lo más conveniente para desarrollar el juego. Si tú tienes un cuarto lesionado, en un juego donde hay sólo 3 cambios te quedas con uno menos. Esa es la razón por la que le doy tanta importancia a este hecho que es muy curioso porque es muy poco frecuente ver tantos lesionados en un sólo equipo en un partido.
Entre las causas por las que Boca tuvo 4 lesionados podemos encontrar múltiples razones, pero yo entiendo que hay una que es determinante. Paso a enumerar algunas aparte de la flexibilidad a la que le dediqué la introducción de esta nota:
Nutrición: la nutrición, influye en las lesiones tales como contracturas, calambres, etc. y también en el rendimiento físico. Yo descarto esta causa, no aceptaría la idea que los jugadores de Boca no tengan un excelente equilibrio y aporte nutricional.
Hidratación: de suma importancia en los partidos de larga duración. Tampoco acepto esta idea.
Equipo médico: los atletas con excelentes médicos, nutricionistas, kinesiólogos, masajistas etc. suelen tener menos lesiones y cuando éstas aparecen, una mayor recuperación. Tampoco le doy demasiada importancia a esta teoría. Boca tiene recursos para tener el mejor cuerpo médico.
Preparación física: la cantidad de lesiones de un equipo tiene relación con el nivel de preparación física de los atletas. Opino igual que en el punto anterior. Boca tiene un excelente preparador físico y dos técnicos muy capaces, no acepto la idea que la puesta a punto no fuera la adecuada.
Esfuerzo físico extenuante: Esto puedo influir más en este caso. River tenía la pelota, manejaba el partido y la hacia correr. Y en fútbol, como en otros deportes de equipo cuando un plantel hace correr rápidamente la pelota, el otro tiene que hacer correr rápidamente las piernas. Es cierto que tiene un gasto energético y físico mayor, Pero ¿Cuántos equipos juegan los 90 minutos colgados el travesaño corriendo de banda a banda y no por eso terminan con 4 lesionados? La semana anterior Boca jugó con Independiente con un equipo suplente, terminó ganando 1 a 0 pidiendo la hora, metidos todos atrás y no tuvo mayores problemas físicos. Hoy en día muchos equipos eligen esa estrategia y no por ello finalizan el encuentro con tantos lesionados.
Un jugador menos: Boca tuvo que jugar con un jugador menos bastantes minutos, lógicamente 10 jugadores tienen que cubrir más espacio y correr más. ¿Pero cuántos partidos vemos que un equipo juega con 10 jugadores todo un tiempo y a veces todo un partido y no se lesionan 4 jugadores?
Razones hay muchas podría seguir enumerando más, puede haber una multitud de causas y que cada una aporte un pequeño grano de arena a la cuestión.
Pero quiero centrarme en una causa sin por ello decir que otras causas no pudieron haber influido en menor medida.
En Educación Física hace décadas que venimos hablando de la alta correlación que hay entre el estrés emocional y las lesiones musculares. Las más comunes son los calambres y las contracturas. Pero también tienen incidencia en otros tipos de lesiones A mayor estrés, inseguridad, miedo, falta de confianza, mayor probabilidad de lesiones. Las causas arriba mencionadas son más fáciles de sobrellevar. Se cambia el aporte nutricional, el kinesiólogo, el preparador físico, el cuerpo médico, etc. Pero en el tema del estrés emocional ya es más difícil tratarlo. En mi opinión este partido cargó de presión y stress a los jugadores de una forma insoportable.
Así como a muchas personas (no a todas) al pasar por un momento de stress o nerviosismo se le contracturan los músculos que conforman la cintura escapular (en español: cervicales) a muchos futolistas (no a todos) se les contracturan los músculos gemelos, aductores, cuádriceps o isquiotibiales por citar algunos ejemplos. Esto también afecta el rendimiento físico. Cuando los músculos se agarrotan, la performance se ve afectada, el atleta ya no puede rendir físicamente al cien por ciento.
Pero una segunda pregunta sería ¿Si la presión era para los 2 equipos por qué Boca tuvo 4 lesionados y River ninguno?
Yo entiendo que la presión a la que estuvieron sometidos los jugadores de Boca fue mucho mayor a la de River. Por las siguientes razones:
River termina el primer partido más tranquilo, porque empata en cancha de Boca 2 a 2 con la cancha repleta sólo de hinchas de Boca. Pero es un 2 a 2 con la particularidad que River empata el partido dos veces. Boca se pone en dos oportunidades arriba en el marcador pero no puede aguantar el resultado.
Luego Boca llega a cancha de River y su micro es apedreado por la hinchada de River. Aquí no voy a analizar si fue culpa de la seguridad, si fue culpa del club, si River debería ser suspendido, ya que sólo me ocuparé de analizar el tema del stress emocional y sus causas.
Boca toma una decisión que termina cargando de una presión a sus jugadores y es no jugar el partido el sábado 24, firmar un pacto de caballeros para jugarlo el 25, no cumplir el pacto, no presentarse el domingo 25 a jugar y pedir los puntos.
River termina copando las redes con carteles “25 de noviembre, Día Internacional del Cagón”
Si Boca hubiera jugado el domingo 25 lo habría hecho con menos presión. Podría decir “nos apedrearon, nos obligaron a jugar, no estábamos bien anímicamente…” Pero eligieron la opción de pedir que le dieran el partido ganado sin jugarlo y esa fue una decisión de la que Boca no salió bien parado. Primero porque no le dieron la copa y segundo porque todas las hinchadas no sólo la de River se empezaron a burlar de ellos, llenaron las redes sociales de afiches, con el “Boca tiene miedo de jugar en Nuñez”, con el “Boca quiere que le regalen la copa”. Todo el país riéndose de Boca llenó a los jugadores de presión. De una presión muchísima mayor a la que River soportaría.
Luego tenemos al presidente de River diciendo “no respetaron el pacto de caballeros” y el famoso “vení a jugar, no tengas miedo”. En esto el presidente de River fue astuto y metió más presión a Boca ridiculizándolo.
Por otro lado tenemos que River llega a la final con un técnico que viene ganando copas hace 4 años y nada podía borrar la campaña que había hecho. Un técnico respaldado por la dirigencia. Boca llegaba con un técnico cuestionado que hacía tiempo estaba en la cuerda floja. Evidentemente un técnico respaldado está tranquilo y brinda tranquilidad a sus jugadores. A un técnico cuestionado le cuesta mucho más brindar esa tranquilidad.
Gallardo dijo “Yo lo quiero jugar en cualquier lado”
Barros Squelotto confesó “hace 30 días que preparo la revancha y hace 60 días que preparo la final, esto te quema la cabeza. Llegás a las 23 horas con la cabeza quemada, es parte de nuestro trabajo, pero esto se ha extendido demasiado"
En estos relatos podemos ver el nivel de presión y estrés emocional que tenía el cuerpo técnico de Boca era mucho mayor.
Gallardo llevaba ganándole a Boca la Copa Argentina, las semifinales de la copa libertadores de 2015 y varios partidos. Todo el país hablaba que River llegaba a la final con el mejor técnico de la historia de River. Cuando un equipo te gana varios partidos seguidos… y ganarle se complica. Es como que salís a la cancha con miedo ya predispuesto a perder. En la época de Ramón Díaz cuando Boca le ganaba los clásicos a River, el patrón Bermúdez dijo “Los de River nos ven y se ponen pálidos”. La frase no será políticamente correcta, pero seguramente era verdad lo que decía. River debía salir a la cancha con las piernas temblando. Lo mismo le ocurre ahora, Boca viene perdiendo con River partido tras partido y en este contexto llega a una final. Otra causa que suma más estrés emocional.
River llegaba a la final siendo el mejor equipo de América desde hace 4 años. Los jugadores de Boca sabían que se enfrentaban a un equipo mucho mejor que el de ellos, que hasta hace muy poco había llegado al récord de 32 partidos invicto. Un equipo que final que jugaba final que ganaba. Lógicamente era una causa más para salir a jugar preocupado, con el miedo a perder otro partido más… demasiada presión.
El partido se traslada a Europa y se juega con público local y visitante. Cuando el primer partido se había jugado con público sólo de Boca. Otra causa para meterle presión a los xeneixes. ¿Si Boca ganaba la final en Madrid quién le iba a reconocer la validez de ese triunfo? Se le iban a reir los de Independiente, Estudiantes, Racing diciendo que no se habían animado a jugarlo en Nuñez, corrían los memes del estadio de River con el título de “La casa del miedo”. Y si Boca perdía ese partido iban a decirle “te ganamos en cualquier lado”. ¿Qué jugador puede soportar semejante presión? Si lo perdía River, no era tan trágico, lo habían sacado no sólo de su estadio sino del país, se tenía que jugar sólo con público de River y se termina jugando con más hinchada de Boca que de River. El millonario tenía menos presión iba decir “tuviste miedo de jugarlo en el monumental”.
Como si fuera poco ex jugadores de Boca salen a meter más presión. Blas Giunta, dijo “yo hubiera jugado con la cabeza rota” ¿Cómo le cae a un jugador como Pablo Pérez que todos los medios y redes sociales repitan la frase de un referente de la talla de Blas Giunta, reconocido por ser uno de los jugadores más aguerridos de Boca de los últimos tiempos? Pablo Pérez fue otro de los 4 lesionados reemplazados.
Cuando Benedetto marca el primer gol, sale corriendo buscando a Montiel para sacarle la lengua, con los ojos desorbitados, como enajenado, parecía poseído… Es raro que un jugador de experiencia internacional reaccione así. ¿Estaría cargado de un stress emocional insoportable? Luego sale lesionado. No estoy justificando su accionar, es más creo que debería haber sido expulsado por conducta anti deportiva. Por una situación parecida en un River - Boca fue expulsado Carlos Tevez por festejar un gol moviendo los brazos imitando el vuelo de una gallina.
Los jugadores de River también terminan el partido en mucho mejor estado físico que Boca y en eso también influye el estrés emocional que tanto afectó a Boca. La última jugada que finaliza con el gol de Martínez, el pity recorre casi todo el campo a toda velocidad como si fuera el minuto uno, y los jugadores de Boca no lo alcanzan ni para derribarlo. Cuánto más avanzaba el Pity en la carrera, más metros les sacaba a los defensores. En mi opinión ese estrés emocional descomunal fue una de las causas principales que perjudicaron el rendimiento físico de los jugadores de Boca y responsable de tantas lesiones.
Fin de la historia
PD: Francis Fukuyama se equivoca cuando habla del “Fin de la Historia”. La historia no termina, seguirá avanzando y nos seguirá sorprendiendo como también River y Boca.
