En
las últimas décadas han sido muchas las personas que han adoptado
con cierta facilidad hábitos de ejercicio físico o de deporte. Los
medios de comunicación y el mismo sector médico manifiestan
constantemente la necesidad de cuidar el cuerpo con ejercicio
físico. Este movimiento masivo ha traído consigo decepciones y
frustraciones. Para algunas personas, la oferta de ejercicio físico
y deporte no se adapta a sus gustos y necesidades, otras han probado
algo y les ha defraudado. En algunos centros se comprobado que
algunas personas abandonan por sentirse ridículas y marginadas.
Hay
dos factores muy importantes a tener en consideración en nuestra
profesión:
1)
Después de muchas décadas de publicidad gratuita, de abrir centros
públicos a precios populares, de disponer de supermercados del
Fitness, todavía hay más de un 40% de la población que no practica
ejercicio físico de forma regular.
2)
Es sorprendente la rotación de clientes que tiene lugar en los
centros deportivos y gimnasios, son muchas las personas que inician
y abandonan al poco tiempo.
Debemos considerar estos dos puntos como un fracaso en nuestros
objetivos, algo no funciona correctamente.
Hay
que abrir nuevos caminos hacia direcciones poco utilizadas, más
emocionales, posturales, conscientes y energéticas. Es importante
integrar a las personas en los ejercicios físicos y deportivos que
cumplan con sus expectativas y objetivos que se proponen alcanzar y
maximizar la participación.
La
oferta de ejercicio físico y deporte tiene tendencia a brindar
actividades donde el movimiento impera, la velocidad, la resistencia
y la fuerza muscular son imprescindibles y son objetivos
prioritarios. En muchos casos se argumenta que es para desconectar
de la monotonía y de los problemas del trabajo o la vida cotidiana,
de esta manera no es preciso pensar, se desconecta.
La
desconexión del cuerpo y la mente es la fuente de la infelicidad,
ninguna persona es feliz cuando su cuerpo está realizando una
actividad, un ejercicio o un deporte y su mente está fija en otro
objetivo, dispersa o, sencillamente, no está presente. La felicidad
está en estar presente, en realizar las cosas con cuerpo y alma, en
la integración de todo lo que compone el ser humano.
Las
actividades que proponen una integración suelen ser estereotipadas,
con una metodología concreta y muy enmarcada en un contexto de la
vida en oriente como es el caso del Yoga, Tai-Chi, Chi-kun,
reflexología, meditación, Do-In... He denominado New Age Activities
o Gimnasias suaves a una adaptación de este tipo de ejercicios a las
necesidades, conocimientos y disponibilidades de las personas que
vivimos en occidente.
Percepción del tono
muscular y reclutamiento tónico
Tener conciencia del tono muscular adecuado a cada una de las
situaciones cotidianas evita gastos energéticos innecesarios y la
aparición de contracturas musculares por agotamiento. Es un paso más
hacia el conocimiento del propio cuerpo.
Un
ejemplo concreto, que materializa la necesidad de encontrar el tono
justo a cada situación, es la poca ergonomía de un conductor novato
que se fatiga por el exceso de tono muscular que utiliza. La
musculatura excesivamente tensa presiona los capilares, el aporte de
sustancias nutritivas y oxígeno disminuye, la eliminación de
sustancias tóxicas es dificultada y el cansancio aparece
rápidamente. Desdramatizando el gesto se llega a una economía, una
disponibilidad pasivo corporal que nos permite recorrer kilómetros
sin fatiga.
Ya
el filósofo existencialista Kart Graif Duhaïm, planteó obtener el
equilibrio justo teniendo una idea clara de la participación
muscular y cardiovascular óptima en cada situación. Proponía estar
bien aquí y ahora, estar en una coherencia mental con lo que se
hace, encontrar una actitud globalmente justa que es el hilo
conductor del cuerpo y conciencia que preconiza e imparte en su
método Georges Courchinoux y la coherencia entre gesto e intención
del gesto del Chi-Kun.
Ejercicios simples de propiocepción, de reclutamiento tónico
cualitativo y de soltura, proporcionan sensaciones de las que se
obtiene la noción de tono óptimo en las diferentes situaciones
diarias. La persona aprende a economizar su energía, a manejar los
consumos energéticos, desarrollar la facultad de adaptación y
estimular los sistemas para ello.
Reclutamiento tónico cualitativo y soltura
- En
diferentes actitudes: posición anatómica erecta cómoda, sentados
y tumbados. Toma de conciencia del tono ligero necesario para
mantener la postura, la participación muscular justa para resistir
la acción de la gravedad.
Contracción muscular progresiva de la extremidad inferior de un
lado, pie, piernas, muslos, periné... Mantener la contracción e
iniciar el otro lado para pasar a relajar, soltar, comenzando con la
primera parte de cuerpo que se inició la contracción. Lo mismo con
las extremidades superiores y tronco, mano, antebrazo, brazo,
hombro, cuello, espalda, zona lumbar,…
Se aumenta la propiocepción y la dificultad con
localizaciones por grupos musculares (gemelo, sóleo, tibial,…)
Modelado
Ejercicios de modelado permiten conocer e interiorizar el
tono ligero y justo necesario en posiciones corporales diversas,
proporcionan una noción de ligereza, evitan el cansancio y facilitan
mantenerse en posturas necesarias para la realización de
determinadas tareas cotidianas. El uso de un elemento común entre
una pareja, un simple bastón, una cuerda o una tela permite realizar
movimientos que ayudan a descubrir y adaptar un tono ligero en
dinámica.
- En
un círculo formado por parejas, una persona frente a la otra, la
persona que está en el interior del círculo es el escultor, la otra
persona está con los ojos cerrados.
El escultor guía con sus manos a la otra persona, tocándola muy
suavemente y la va colocando en una posición “escultórica”
determinada sin hablar. Al finalizar los escultores visitan el
“museo” que permanece interiorizando la postura, vivenciándola con
los ojos cerrados. Se intenta “ver” la presencia. Después de
intercambiar los papeles se hace una puesta en común de las
sensaciones percibidas en ambas situaciones.
-
Misma distribución por parejas. Una persona siente, escucha y otra
ayuda a movilizar. Previamente se observa la actitud postural de la
persona que escucha y está con los ojos cerrados. Al final se
corregirá.
a) La persona con ojos cerrados “escuchando” y la otra toca
suavemente con un dedo que “quema”. La persona tocada al sentir el
dedo lo rechaza adoptando posiciones diversas según la parte del
cuerpo que se siente tocada.
b) La reacción de la persona tocada es ahora de empujar el dedo
suavemente con la parte del cuerpo que es tocada.
En ambos ejercicios se acaba colocando a la persona en una postura
perfecta, incluso corrigiendo actitudes posturales defectuosas.
-
Idéntica distribución para el ejercicio del
alga wakame
La persona con ojos cerrados escucha y al ser tocada levemente por
su pareja oscila como un alga. La misma reacción soplando e incluso
se intenta lo mismo sin tocar, sintiendo el calor y oscilando al
notarlo.
Movimiento adaptado
-
Por parejas, uno delante de otro, la persona que está detrás ojos
cerrados y con una mano en la articulación del hombro de su pareja.
Sin desplazamiento la persona de delante inicia movimientos muy
lentos y suaves que la persona que está detrás debe adivinar y
copiar. Más adelante se puede incorporar desplazamiento muy lento.
-
Las mismas parejas frente a frente, una con los ojos cerrados,
mantienen suavemente en una de sus manos un bastón, una cuerda o un
trozo de tela o de ropa suavemente tensa.
La persona que tiene los ojos cerrados debe seguir los movimientos
que hace la otra persona y que le vendrán dados por el objeto que
sostienen entre ambas.
CHI-KUN INICIACIÓN
Una
vez descubierto el tono justo y la actitud postural correcta, es muy
simple ajustar la colocación y para realizar ejercicios de chi-kun
tiene suma importancia.
Ajustar la colocación de pies que deben estar separados
aproximadamente un pie de largo entre ellos, rodillas muy levemente
flexionadas, la cadera debe verticalizar el sacro, la primera
costilla paralela al suelo, el cuello relajado y la lordosis
cervical justa.
Hay
dos formas de chi-kun, la forma ying y la forma yang. En la forma
ying hay poca participación muscular, es fluida, dulce, suave,
graciosa y facilita la receptividad y la interiorización. La forma
yang utiliza aproximadamente un 50% de la tensión muscular máxima
general, todos los músculos tienen una cierta tensión, es una forma
sólida, de fuerza y que expande, facilita la exteriorización.
La
combinación de ambas formas y seleccionar la óptima para cada
instante es lo idóneo. Iniciar con la forma ying facilita la
comprensión y el aprendizaje.
Después de ajustar la colocación se inician los seis pasos básicos
de chi-kun repitiendo cada uno de ellos varias veces e
interiorizando su intencionalidad.
1-
Interiorización, relación
personal armoniosa. Manos a la
altura del periné con la punta de los dedos casi en contacto,
elevar las manos por encima del ombligo inspirando abdomino-diafragmáticamente
y girar las manos al descender exhalando de la misma manera
2-
Ofrecimiento, ayuda y
apertura a los demás. El mismo
inicio, inspirando adbomino-torácicamente al elevar las manos hasta
el pecho, los codos a la altura de los hombros y abrir brazos en
cruz. Descender lateralmente exhalando
3-
Abertura al universo.
Iniciar idéntico y elevar los brazos
lentamente hasta la vertical mientras se realiza la inspiración
abdomino-torácica y clavicular alta
4-
Conciencia de la expresión de
dualidad cortical (lógica – intuitiva), hemisferio derecho –
izquierdo. Elevar el brazo
izquierdo inclinando el tronco y se alarga ligeramente el derecho
mientras se inspira, igual al otro lado
5-
Aceptación de la dualidad y
la globalidad. En ligera flexión de
tronco, brazos caídos, elevar tronco y brazos por la izquierda
mientras se inspira y descender por la derecha al espirar. Igual al
otro lado
6-
Admisión de límites y de que
toda dualidad tiene un eje y un centro.
En flexión de tronco, cada mano en la bóveda plantar
y al elevar el tronco frotar levemente la parte interna de muslos,
externa de tronco pasar por posición de plegaria y elevar los brazos
a la vertical mientras se inspira, descender exhalando.
Después de aprender la forma Ying, realizar una escucha de
sensaciones y una puesta en común. Iniciar la forma Yang y al acabar
escuchar y verbalizar con el resto de componentes del grupo.
YOGA FÁCIL
Teniendo en consideración las posibilidades de movimiento de nuestro
cuerpo y el interés que tiene el mantenimiento de la movilidad
articular, el yoga se brinda como un excelente medio para ello.
Los
ejercicios respiratorios de yoga, pranayamas, regulan y dosifican el
aporte de oxígeno, proporcionan una relajación general significativa
interesante antes de realizar los ejercicios, las asanas.
Yoga iraní
Es
un yoga respiratorio y su objetivo es movilizar los volúmenes de
reserva, tanto el volumen inspirador como es espirador. Se puede
realizar de pie o sentado.
Movilización del volumen inspiratorio
Tres o cuatro movimientos elevando los brazos lateralmente hasta
tenerlos en la vertical del cuerpo mientras se inspira
constantemente. Al final de la inspiración óptima, apnea con
desbloqueo de tímpanos y flexión anterior del tronco cruzando los
brazos frente a la caja torácica para realizar una compresión
torácica. La compresión logra aumentar el volumen inspiratorio y
permite realizar una pequeña inspiración más al elevar de nuevo los
brazos, es la inspiración complementaria. Al descender los brazos,
se exhala de forma relajada, expulsando el aire, como si de un hilo
se tratara, con los labios casi cerrados.
Movilización del volumen espiratorio
Después de la inspiración anterior, ayudar a expulsar completamente
el aire hiladamente con tres movimientos descendentes de los brazos.
Al final de la espiración completa se realiza una apnea y se elevan
los brazos sin inspirar, se distiende el abdomen por un descenso
voluntario del diafragma. Bajar los brazos para realizar una
espiración complementaria. La nueva inspiración debe ser lenta para
evitar turbulencias pulmonares.
Movilización del volumen inspiratorio y espiratorio
Una vez dominadas las dos movilizaciones se realizan las dos
seguidas.
Liberar bases y cúpulas
La
parte baja de los pulmones, las bases y la parte alta, las cúpulas,
están poco ventiladas, tienen poca movilidad y son consideradas una
de las causas de las cifosis dorsales altas. Abrir, hacer concientes
y liberar estas partes de nuestro sistema respiratorio permite
oxigenar y liberar los pulmones.
Antes de realizar la liberación realizar unos sonidos vibrados,
mantras y después repetir para comparar sensaciones. Conviene
repetir las sonoridades de tres diferentes modos; una sonoridad
larga que abre, esculpe y desincrusta; una sonoridad repetida 3 o 4
veces en una misma exhalación, como el sonido de una campana, para
limpiar y una frecuencia más rápida de 8 a 12 veces por exhalación
para tonificar, estimular.
Liberación de las bases
Sentado, piernas recogidas al lado izquierdo, mano izquierda apoyada
en el suelo con el brazo estirado y mano derecha abierta en las
costillas flotantes derechas con el pulgar por detrás de la espalda.
Incrementar la respiración, inspiración y espiración, en la zona
donde está la mano derecha como una succión al inspirar. Elevar el
brazo derecho verticalmente y seguir amplificando la respiración. En
posición sedente con piernas cruzadas realizar una “escucha”
comparativa de los dos lados antes de iniciar el ejercicio al otro
lado.
Liberación de las cúpulas
Sentado, piernas recogidas al lado izquierdo, mano derecha apoyada
en el suelo con el brazo estirado y mano izquierda abierta en las
primeras costillas del lado derecho. . Incrementar la respiración,
inspiración y espiración, en la zona donde está la mano izquierda
como una succión al inspirar. La mano izquierda por encima de la
cabeza tocando la oreja derecha, inclinar la cabeza a la izquierda y
ayudar con la mano izquierda para estirar escalenos y seguir
abriendo cúpula mientras se inspira. En posición sedente con piernas
cruzadas realizar una “escucha” comparativa de los dos lados antes
de iniciar el ejercicio al otro lado.
Pranayamas simples
Ejercicios respiratorios sencillos que se pueden realizar en
cualquier momento y proporcionan una calma, serenidad y tranquilidad
profunda. Es interesante hacerlo antes de realizar una acción que
nos pone nerviosos, previo a las asanas o como inducción a una
relajación o meditación.
Circuito de aire
Sentado en una posición cómoda que respete las curvaturas
fisiológicas de la columna, con el pulgar derecho tapar el agujero
derecho de la nariz e inspirar mientras se cuenta hasta tres o
cuatro. Tapar con el índice el agujero izquierdo de la nariz y
contar el triple de tiempo, nueve o doce. Levantar el pulgar
abriendo el lado derecho y exhalar contando el doble de tiempo de la
inspiración, seis u ocho. Repetir iniciando la inspiración por el
lado que se ha acabado de realizar la espiración, el lado derecho.
Después de haber completado la serie, se puede ir aumentando el
tiempo de inspiración, de apnea y de espiración sin forzar.
Aprovechamiento del oxígeno
Sentado en una posición cómoda que respete las curvaturas
fisiológicas de la columna. La persona que dirige la sesión da entre
15 y 20 palmadas a aproximadamente una palmada por segundo. Éstas
sirven de guía para realizar espiraciones diafragmáticas forzadas al
mismo ritmo. Sin descanso se aumenta la frecuencia de las siguientes
15 a 20 palmadas, se procura seguir el ritmo espiratorio, se puede
realizar una última serie más rápida. Después de la última
espiración se realiza una inspiración, exhalación y, de nuevo,
inspiración profunda para mantener el aire y contar los segundos que
se puede mantener el aire en los pulmones. Cuando se note la
sensación de no poder aguantar más se comprueba que sensaciones se
tienen (temperatura, pulsaciones,…) para expulsar el aire y respirar
pausadamente mientras se realiza una “escucha” de sensaciones.
Yoga ocular
Relajar los músculos y el conjunto de los ojos proporciona una
distensión nerviosa muy importante, disminuye las preocupaciones, la
tensión intracraneal y prepara para una propiocepción global. Son
ejercicios muy interesantes para practicantes de deportes de equipo
donde la focalización y la visión periférica son extremadamente
importantes.
Las
personas pueden estar de pie, sentadas o tumbadas, en función del
interés que pueda tener lograr una menor o mayor relajación.
Focalización:
Si la persona está tendida supina, inicia con los ojos cerrados
unos segundos de respiración para abrir los ojos mirando el techo.
Estira ligeramente un brazo con la mano cerrada y el pulgar
extendido que queda justo encima de los ojos. Observa con detalle el
dedo, la uña, su contorno y pasa a observar el fondo, el techo con
detalle dejando que la figura del dedo quede borrosa delante. Cambia
de focalización, del techo al dedo y viceversa varias veces hasta
cambiar de brazo.
Stretching ocular:
En la misma posición con un brazo estirado y pulgar extendido,
inclina lateralmente el brazo y sigue con la mirada el pulgar sin
rotar la cabeza, al llegar a la posición de estiramiento máximo lo
mantiene e intenta avanzar algo, siempre observando el pulgar, para
ello puede ayudarse moviéndolo ligeramente. Retornar lentamente al
centro e iniciar lo mismo con el otro brazo al lado contrario.
Visión panorámica:
Si la persona sigue el ejercicio tumbada, después del ejercicio
anterior, coloca las manos encima de los ojos para realizar una
suave y agradable presión como masaje. Abre los ojos al techo,
levanta los brazos también hacia el techo y enfoca la mirada hacia
un punto concreto entre las dos manos, va abriendo lentamente los
brazos mientras procura ver las dos manos con visión panorámica
hasta casi perderlas, mantiene el “estiramiento ocular” y junta de
nuevo los brazos estirados frente a la cara par realizar lo mismo
con un brazo que baja y uno que sube vertical y, posteriormente,
diagonalmente. Se puede finalizar realizando el mismo ejercicio con
los ojos cerrados.
Asanas
Posteriormente a los ejercicios respiratorios, yoga fácil presenta
una selección de las asanas simples que realizadas con un orden
lógico, de la flexión a la extensión, de la inclinación lateral
derecha a la izquierda y de la torsión derecha a la izquierda.
Suponen una sesión de yoga satisfactoria en pocos minutos. Si se
dispone de tiempo se puede realizar con ellas una perfecta
introducción a uno de los objetivos del yoga, la meditación.
El
yoga es una excelente ayuda para mejorar la amplitud articular, es
un estiramiento pasivo. Debe de buscarse una posición siempre cómoda
y en la que se pueda mantener una respiración normal e incluso algo
relajada. Localizar las zonas de tensión que provoca la asana
facilita el estiramiento y la propiocepción, es importante
visualizar la zona y su conformación anatómica para inducir el
estiramiento.
Ejercicios prácticos:
AUTOMASAJE
Es
de alto componente energético, respeta los principios de las
terapias y el protocolo es liberar las periferias (pies, manos y
rostro), las cinturas (escapular y pélvica) y el eje (columna).
Mediante los masajes se facilitan la movilidad de la energía y su
circulación, se favorece el drenaje. Si no se sigue este protocolo
pueden surgir manifestaciones no deseables, especialmente cuando se
realiza en grupos.
Automasaje podal
Es
muy curiosa la semejanza del borde interno del pie con la silueta
posterior de la persona de perfil. La reflexología pone un punto de
luz a esta similitud. El automasaje podal respecta la reflexología
del pie y sus zonas. Precisa una pelota de entre dos y tres
centímetros de diámetro.
La persona de pie con la pelotita bajo su pie, cierra los ojos y
escucha como se siente, como nota los apoyos que le proporcionan los
pies.
-
Realiza un masaje general global previo a toda la planta del pie
-
Con apoyo en el talón hace un masaje lineal en la base de los dedos
-
Presiona suavemente el espacio interdigital desde pulgar al dedo
pequeño donde se hallan sucesivamente los puntos filtro de hígado,
estómago, vesícula biliar y vejiga. Al presionar suspira o verbaliza
un lamento en función de la presión que percibe.
-
Masaje circular en el punto central de la bóveda plantar, sentido
horario
-
Presión suave del punto central de la bóveda con suspiro o lamento
-
Con apoyo en talón masaje en la línea diafragmática en la bóveda
plantar
-
Con apoyo en la punta del pie masaje lineal en talón
-
Coger la pelotita con el espacio interdigital
Ejercicio de escucha comparativa, pie masajeado y pie por masajear,
puesta en común de las sensaciones percibidas y cambio de pie
El mismo masaje en las manos para liberar las periferias y pasar al
rostro
Automasaje del rostro
Tendido supino, con piernas flexionadas y pies el suelo se
deslordosa ligeramente la zona cervical bajando levemente la
barbilla.
-
Fricciones en la frente verticales y horizontales
-
Deslizamientos sobre las cejas, terminando con masaje circular sobre
las sienes
-
Tracciones de la raíz de la nariz
-
Masaje en las glándulas lagrimales
-
Deslizamiento bajo los ojos, estiramiento de la piel y relajación
-
El mismo masaje bajo los pómulos
-
Fricción intensa sobre las alas de la nariz
-
Percusiones y deslizamientos sobre los arcos zigomáticos
-
Masaje profundo de la raíz de los dientes, empezando por los caninos
hacía los maseteros. Lo mismo en la mandíbula inferior con
insistencia sobre los maseteros
-
Fricción sobre y bajo los labios con el borde externo de los índices
-
Deslizamiento bajo la mandíbula hasta las orejas, corresponde a
riñón, vejiga y órganos de la pelvis
-
Masaje en las orejas, reflejo de todos los órganos
-
Estirar el pabellón auricular hacia abajo, hacia atrás y hacia
arriba
-
Liberación de la nuca para descongestionar
-
Presiones ritmadas con la palma de las manos y los índices doblados
sobre las orejas
-
Fricción detrás de las orejas, donde se inicia el cuero cabelludo y
subir hasta la parte superior del cráneo. Coger una mata de pelo y
traccionar a la intensidad que se estime
-
Percusiones con el puño cerrado y la punta de los dedos en toda la
cabeza
Escuchar las sensaciones y pasar a liberar las cinturas.
Automasaje de las cinturas
Los
automasajes tienen un alto componente energético y un protocolo que
respeta puntos de acupuntura localizados en la cintura escapular y
pélvica se realizan unas presiones con ayuda de una pelotita. Ante
cualquier manifestación de molestia o dolor se responde con un
lamento, una exhalación sonora. El automasaje en la cintura
escapular descongestiona la zona y es de gran ayuda para
cervicalgias crónicas, evita la congestión acomodativa. El
automasaje en la cintura pélvica es muy interesante una semana antes
de la menstruación, cambia las sensaciones dolorosas. Reducen las
tensiones nerviosas del plexo solar.
Ambos automasajes para deportistas evitan el sobreentrenamiento,
ayudan a disminuir los microtraumas, facilitan el retorno venoso y
liberan las articulaciones.
Cintura escapular
Tendido supino, piernas flexionadas con los talones cerca de los
glúteos. Sentir el apoyo de la parte posterior de los hombros,
comparar los dos lados.
-
Pelota bajo el hombro en la articulación escápulo humeral.
Respiración suave, relajada y descansar el peso del hombro sobre la
pelota sin empujar. Coger con el brazo contrario la muñeca del brazo
que tiene la pelota debajo del hombro y moverlo en diferentes
direcciones con respiración relajada
-
Colocar la pelota en la parte media del borde superior de la
escápula, en el supraespinoso y repetir el movimiento del brazo
ladeando ligeramente el cuerpo
-
Situar la pelota bajo la espina de la escápula, en el infraespinoso
y realizar el movimiento de brazo
-
Con la pelota entre el borde superior interno de la escápula y la
columna, es posible trabajar todo el contorno de la escápula. Para
mayor efectividad cruzar los brazos delante del cuerpo
-
Colocar la pelota en el borde inferior de la escápula y trabajar
como el anterior
-
Situar la pelota en las costillas flotantes y ladeando el cuerpo
masajear esta zona
Sacar la pelota y escuchar diferencias, poner en común y cambiar de
lado. Apreciar el espacio creado y llenarlo de sensaciones
agradables. Es interesante despertar con un estiramiento a voluntad.
Cintura pélvica
Tendido supino, piernas flexionadas con los talones cerca de los
glúteos. Sentir el apoyo de las caderas en el suelo, comparar ambos
lados.
-
Pelota bajo la articulación sacroilíaca de un lado, llevar la pierna
del mismo lado hacia el pecho con la ayuda de las manos y movilizar
en todas direcciones con respiración relajada
-
Situar la pelota justo por debajo de la mitad de la cresta ilíaca y
movilizar como el ejercicio anterior
-
Colocar la pelota en el centro del glúteo, en el punto de salida del
nervio ciático. Con ambos talones muy cerca de los glúteos realizar
un automasaje transversal suave
-
Pelota hacia el exterior y a la misma altura, en el músculo
piramidal, llevar la pierna del mismo lado hacia el pecho y
movilizar ladeándose si es necesario
Eje,
columna
Siguiendo el protocolo y respetando el principio de las terapias,
después de liberar periferias (manos y pies) y cinturas (escapular y
pélvica) liberamos el eje, la columna. El objetivo es poner en
tensión la columna y tiene mucha eficacia sobre el sistema nervioso
central y periférico, reduce las tensiones nerviosas.
Se
precisa de un tubo o palo de aproximadamente un metro de largo, un
diámetro de 6 a 12 centímetros recubierto con moqueta, espuma ligera
o una toalla.
-
La persona se coloca longitudinalmente sobre el tubo con apoyo
occipital, dorsal y sacro
-
Estira el eje, deslordosando la zona cervical y lumbar para
descomprimir la salida neurológica de la médula
-
La persona que dirige realiza un bombeo sacro-lumbar, estira y
bascula la pelvis de las personas que ejecutan el ejercicio
-
Se realizan entre cuatro y seis respiraciones profundas con:
a) manos en abdomen y respiración abdominal
b) brazos y manos encima de las costillas
flotantes, en la espiración empujar suavemente reduciendo la
lordosis diafragmática
c) b) brazos y manos cruzados encima de la caja
torácica, en la espiración empujar las costillas flotantes
reduciendo también la lordosis diafragmática
-
Ladeándose ligeramente realizar un masaje paravertebral
-
Sacar el tubo de la espalda, “escuchar” la espalda mientras se
coloca el tubo en el sacro elevando las piernas y colocar los pies
planta con planta mientras se estiran las rodillas
-
Manteniendo el tubo en el sacro, una rodilla extendida y otra
flexionada hacia el pecho recociéndola con las dos manos para
estirar ligeramente el psoas
-
Con el tubo en el hueco poplíteo realizar una “escucha” de las
sensaciones y entrar en una interiorización progresiva, una
relajación profunda.
Relajación
Los
diferentes métodos y medios de relajación disminuyen el tono de
vigilia y el tono medio, El tiempo total de una relajación tipo
puede oscilar entre 15 y 25 minutos.
Induciendo previamente a los participantes con distensiones
periféricas de pies manos y rostro, distensiones de las cinturas y
del eje, en cinco minutos se entra en un estado de ondas alfa.
Las
ondas alfa reequilibran el reloj biológico, diez minutos de ondas
alfa equivalen a una hora de sueño. Estas ondas tienen unas
oscilaciones de vigilia a sueño, en la vigilia está acelerada la
comprensión, la escucha y la concentración, en el sueño puede haber
una falta total de percepción auditiva, incluso una pérdida de la
noción del tiempo.
Teniendo en consideración estas fluctuaciones, en diez minutos puede
haber cinco de vigilia y cinco de sueño, la persona que dirige la
relajación debe de ir modulando el tono de voz, la velocidad del
habla y repitiendo los contenidos.
Interiorización progresiva
Se parte de una distensión periférica. Imaginar las manos,
los dedos, visualizarlos y dar órdenes de relax, comparar un lado
con otro y observar la diferencia de tensión, relajar el lado que
esté más tenso y de las superficies de contacto con el suelo. Igual
con los pies y con la cabeza, visualizando cada parte y dando
ordenes voluntarias de relajación.
Distensión de las cinturas.
Visualizar el antebrazo, el brazo y la articulación de la cintura
escapular, distender toda la zona y comparar ambos lados para
“aprender” del lado más relajado y de las superficies de apoyo con
el suelo. Observar las piernas, rodillas, muslos y cintura pélvica,
distender, comparar los dos lados, las superficies de contacto con
el suelo y utilizar la información para relajar el lado más tenso.
Distensión del eje, columna.
Visualizar coxis, sacro y articulaciones lumbares para inducir a la
relajación. Observar ambos lados de la columna, zona de contacto de
la lordosis lumbar en lado derecho comparado con el izquierdo,
relajar la zona que menos contacto hay. Igual con la zona dorsal.
Visualizar la columna dorsal, el apoyo que tiene en el suelo y
cuando se inicia la lordosis cervical, relajar.
Escucha los ruidos
internos, la respiración, el corazón, los intestinos,…Los ruidos
dentro de la sala, el murmullo externo de la sala. Regresar a los
sonidos de la sala, a los ruidos más cercanos, la respiración y
centrar la atención exclusivamente en la respiración. Sentir entrar
el aire en la nariz y sentir como sale, notar la leve diferencia de
temperatura del aire al entrar y salir de nuestro cuerpo. Observar
como al coger automáticamente el aire los alvéolos de la nariz se
abren ligeramente y al expulsar se cierran de nuevo.
Reactivación progresiva, respiratoria y neuromuscular.
Hacer la respiración cada vez más
voluntaria, más consciente y más amplia. Bostezar, despertar lenta y
progresivamente movilizando uno a uno los dedos de las manos,
disfrutando de las sensaciones que proporciona este despertar
consciente. Movilizar los dedos de los pies, las manos y los pies,
los brazos y las piernas y estirarse. |