INTRODUCCIÓN:
En este
artículo voy a presentar algunos consejos nutricionales basados en
el conocimiento científico del metabolismo energético de los
alimentos, de forma que pueda ser utilizado por el ciclista de
cualquier categoría o nivel competitivo.
Analizaré como deben ser las comidas previas a la competición,
durante la misma, y las comidas que siguen a la competición a corto
y medio plazo. No trataré el tema de las comidas en el día o los
días anteriores, asunto que sería motivo de otro artículo.
El objeto fundamental de estos consejos, es ayudar al ciclista a no
cometer errores falsamente infundados en ideas que circulan por el
pelotón. Es básico entender que la alimentación no va ha
convertirnos en campeones, pero una mala alimentación puede hacernos
perder una carrera que hemos preparado correctamente durante meses,
en cuestión de minutos.
Así mismo, este artículo será útil para todos aquellos deportistas
que participen en disciplinas con características similares al
ciclismo, como podrían ser triatletas, atletas de fondo, esquiadores
de fondo, etc. ALIMENTACIÓN PRE-COMPETITIVA
Lo primero,
sería resaltar que no será la comida previa a la competición la que
llenará los depósitos de glucógeno del cuerpo para luego utilizarlos
en forma de energía. Si esperamos a esta última comida, ya será un
poco tarde; es un trabajo que deberíamos haber conseguido en el día o
los días anteriores.
De
este modo, el primer mito que rompemos es el de la importancia que se
le da a esta última comida. No conseguiremos almacenar más energía
porque tomemos más hidratos de carbono, así que el objetivo
fundamental de esta comida será el de evitar que nos produzca una
digestión molesta y que no aparezca durante la competición la
sensación de hambre.
Podemos decir, en términos generales que debe cumplir las siguientes
características, independientemente de las particularidades de cada
competición:
-
Fácilmente digerible (baja en grasas y proteínas)
-
Debe ser administrada con tres horas de antelación como mínimo
-
Debe tener un alto porcentaje de hidratos de carbono, y estos serán
siempre complejos (cereales, pasta, arroz y pan integrales)
-
Puede tener algo de verduras y frutas que aumentan la sensación de
saciedad y la fibra favorece la absorción intestinal
Dependiendo
de la hora del día en que se dispute la carrera, la alimentación será,
como el lógico, diferente.
Cuando la
competición es por la mañana, el desayuno puede ser del siguiente
modo:
-
Tostadas de pan integral
-
Cereales integrales o muesli
-
Queso semidesnatado y jamón serrano o pechuga de pavo
-
Zumo de frutas natural o fruta fresca
-
Yogurt desnatado o leche desnatada
-
Galletas integrales
Estos son
algunos de los alimentos recomendables en un desayuno. No quiere decir
que se deban ingerir todos ellos, ni que todo ciclista deba ajustarse
a este desayuno tipo. El desayuno debe cumplir que sea individual y
personal de cada uno. Cada uno debe ajustarlo a sus gustos y a su
capacidad de digestibilidad. Cualquier desayuno será válido si cumple
las características anteriormente citadas.
Hay personas
a las que los productos lácteos les dificulta notablemente la
digestión. Hace falta estar acostumbrado a desayunar diariamente con
estos productos. Si intentas innovar un desayuno el día de la
competición, probablemente acabarás lamentándolo.
Cuando la competición es en horario de tardes, la comida previa debe
cumplir las siguientes condiciones:
-
Comida rica en pastas, arroces y pan integrales
-
Comida baja en grasas, especialmente animales, y
proteínas
-
Rica en vitaminas y minerales (verduras, frutas,
etc.)
-
Una comida tipo sería, una ensalada variada en el
primer plato, pasta o arroz en el segundo, y fruta del tiempo en el
postre
-
Se deberá tener un especial cuidado con la
composición de los aliños y salsas, ya que pueden llegar a tener un
algo contenido graso
-
La comida se realizará cuatro horas antes de la
competición
-
No debe incluir bebidas o refrescos carbonatados o
azucarados
-
Sí pueden tomarse bebidas ricas en minerales
En muchos
casos, la comida debe realizarse en el intermedio del trayecto entre
el domicilio del ciclista y el lugar dónde se celebra la competición.
En estos casos es muy aconsejable preparar la comida en fiambreras y
ajustarla lo más posible a las características anteriormente citadas,
además de resultar palatarmente apetecibles.
Es necesario
que el ciclista conozca la sensación de pesadez que produce la
alimentación con un alto contenido en pasta y arroz. Puede ser que
tras ingerir dos o tres comidas de pasta o arroz, el ciclista tenga
pesadez general y particularmente en las piernas. Esta sensación es
debida a que los hidratos de carbono necesitan de varias moléculas de
agua para ser almacenados en el tejido intramuscular. La pesadez no es
más que la mayor retención de líquido, pero no perjudicará en absoluto
al rendimiento. El deportista debe aceptar esta sensación como
positiva, y deberá ser un síntoma de que ha estado haciendo bien las
cosas. Cuando realice los primeros kilómetros, estas sensaciones
desaparecen.
En
los momentos previos a la competición, es cuando puede llegar a
perderse de nuevo las opciones de victoria:
-
Tomar agua continuamente durante el calentamiento en pequeños sorbos
-
No ingerir alimentos con azúcares simples. Evitar los dulces como
mermeladas, glucosas, zumos, refrescos, etc. Sólo en los últimos
cinco minutos previos estaría permitido, aunque dudosamente
justificado. De esta forma evitaremos que la liberación de insulina
nos dificulte la formación de energía durante el ejercicio.
-
Podemos tomar algún fruto seco o alguna barrita energética, pero no
es necesario
LA ALIMENTACIÓN DURANTE LA
COMPETICIÓN
El
objetivo de la nutrición durante la competición, siempre será el de
mantener los depósitos de energía con combustible adecuado para la
realización del esfuerzo. Por lo tanto, lo fundamental será
plantearnos que tipo de competición estamos realizando y si será
necesario aportar más nutrientes de los la ingeridos antes de la
misma.
Si
se trata de competiciones de corta y media duración (hasta 3 ó 4
horas), probablemente no será necesario ingerir comida durante la
competición. El ciclista puede llevar una pequeña barrita de cereales
o algún fruto seco para evitar la sensación de vacío en el estómago.
Si
nos enfrentamos a competiciones de mayor duración, sí será interesante
ingerir cada 45-60 minutos cierta cantidad de alimento. Los más
fácilmente digeribles y transportables, son los anteriormente
mencionados, barritas energéticas y frutos secos. Evitar alimentos
pastosos que resultan difíciles de tragar cuando nos falta el aire. El
envase debe ser fácil de abrir, pero seguro a la hora de mantener el
contenido.
Lo
más importante será que todo aquello que decidamos tomar durante la
competición, lo hayamos utilizado varias veces anteriormente en los
entrenamientos. Sólo así sabremos si somos capaces de tragarlo y
digerirlo correctamente.
La
utilización de la glucosa líquida sólo la aconsejaría en
circunstancias de carrera muy concretas. La glucosa pasa con gran
facilidad al torrente sanguíneo y de allí a la célula muscular. En
principio la sensación es de un aumento importante de energía, pero
esta glucosa se agota con facilidad y pronto llegará la caída. Salvo
en los últimos kilómetros de carrera, en el caso de pretender disputar
el sprint, no recomendaría su utilización. Para aquellos que se
sienten más “poderosos” con una ampolla de glucosa, les recomendaría
que vaciasen su contenido dentro del bote con agua y la fuesen tomando
diluida de este modo.
Capítulo a parte merecería la hidratación. Con ella intentaremos
reponer las pérdidas de líquido por el sudor, mantener la temperatura
corporal y mantener los niveles adecuados de minerales para realizar
funciones fisiológicas tan importantes como la contracción muscular o
la transmisión de estímulos.
Por
todos es conocida la regla de ir tomando pequeños tragos de agua cada
quince minutos. Esta es una manera muy efectiva de evitar la aparición
de la sensación de sed, síntoma de que ha comenzado la deshidratación
y de que ya ha comenzado la disminución del rendimiento. La
deshidratación puede suponer desde la disminución de rendimiento, la
aparición de calambres musculares, hasta el desmayo o la muerte.
Se
comentan y estudian muchas fórmulas y bebidas adecuadas para el aporte
de líquido durante la competición. No soy partidario de fórmulas
mágicas y mezclas caseras. El líquido que tomemos debe ser rico en
minerales, estar a temperatura ambiente, y si es posible tener algún
hidrato de carbono simple en disolución. La mayoría de los preparados
isotónicos vendidos en el mercado cumplen todas estas condiciones, y
alguno de ellos incluso tiene un sabor agradable (factor bastante
difícil de conseguir en el laboratorio de la cocina).
ALIMENTACIÓN DESPUÉS DE LA
COMPETICIÓN
Es
bastante frecuente que los ciclistas descuiden su alimentación una vez
terminada la competición. Tanto si al día siguiente descansas, como si
comienzas una nueva etapa, la reposición de los depósitos de glucógeno
en el hígado y el músculo serán fundamentales para la recuperación del
deportista en un breve tiempo.
La
finalizar la carrera se producen dos fenómenos a tener en cuenta:
-
Los depósitos de glucógeno están totalmente abiertos
para la reposición energética
-
El organismo continúa exigiendo un mayor consumo de
energía a pesar de haber finalizado el esfuerzo
Aprovecharemos esta situación para aportar gran cantidad de azúcares
simples durante los 30min posteriores a la llegada en meta. Es decir,
aprovecharemos para tomar bebidas azucaradas, dulces, mermeladas,
frutas, zumos... Tenemos unas dos horas de tiempo para recuperar los
depósitos de este modo.
La siguiente
comida importante después de la competición es incluso más importante
que la comida previa a la competición. Igualmente deberemos aportar
gran cantidad de hidratos de carbono complejos (pan, pasta, arroz,
cereales...) que nos terminarán de recuperar los depósitos de energía;
y si al día siguiente vamos a tomar la salida en otra etapa, habiendo
cumplido las reglas anteriormente citadas, puede llegar a provocar una
pequeña supercompensación.
Todas estas
son reglas prácticas basadas en la experiencia y el estudios
científicos sobre la nutrición deportiva. Cada persona es diferente y
cada ciclista deberá reflexionar sobre qué debería cambiar en su dieta
para optimizar su rendimiento. Y como decía Superratón, ha
supervitaminarse y mineralizarse. |