¿Cuántas veces a la vuelta de las vacaciones o el regreso a la escuela de nuestros hijos, nos propusimos comenzar el gimnasio? ¿Y cuántas veces lo hicimos y al mes siguiente lo dejamos? Durante Septiembre y Octubre, los gimnasios comienzan a poblarse de socios, llenos de buenas intenciones y algunos, con flaca perseverancia.
“Las vacaciones implican un momento de relax y tomar la decisión de ir a un gimnasio implica una conducta a seguir, horario, orden, frecuencia. La rutina diaria es un cambio bastante importante comparándolo con las vacaciones y muchas veces, el comenzar el gimnasio es vivido como una exigencia más a la que cuesta acomodarse”, explica la Licenciada en Psicología, Alicia Caparrós.
Según el profesor Marcelo Levin, este período del año “es igual a mayo cuando lentamente aparecen las personas “golondrinas”, que acuden al gimnasio como consecuencia de la primavera y las ganas de estar bien para el verano”.
Ángela Cruz, propietaria de BodyFactory Retiro Sur, exclusivo para público femenino, explicó que las socias que llegan durante estos meses, son clientas metódicas que planifican comenzar el gimnasio de forma seria, casi como si fuera un curso.
“Durante el verano siempre nos decimos lo disciplinadas que vamos a ser. Y muchas mujeres realmente planifican el gimnasio conscientemente dentro de una rutina donde entran hijos, profesión, varios aspectos”, indica Ángela y agrega que para ella, este público es diferente al de Abril que llega básicamente con el pensamiento de verse bien para el verano.
Las claves para no fallar
La Lic. Caparrós, aseguró que organizar una rutina en la que el gimnasio sea una constante requiere bajar el nivel de exigencia, ver los beneficios que acarrea para la salud y encontrar un bienestar, iniciando la actividad en forma paulatina, sin esfuerzos desmedidos y sin pretender encontrar resultados inmediatos.
“La clave principal es pensar que así como en las vacaciones el placer parece que está implícito, también puede encontrarse en el ejercicio físico, dado que cuando se llega al logro de los objetivos buscados, es altamente satisfactorio y justificado el esfuerzo, la constancia y el empeño que se ha puesto”, sentenció Caparrós.
“Si bien la parte estética es importante, hoy las personas asocian el gimnasio con el bienestar y la salud, con encontrarse uno mejor”, explica Ángela y detalla que en su centro, las actividades más concurridas son las relacionadas con Pilates, Baile y “Escuela de Espalda”.
¿Cómo elegir el mejor centro deportivo?
Los gimnasios se eligen según varios motivos pero la cercanía a la zona donde uno vive o trabaja y la cuota, suelen ser los principales.
Para Marcelo Levin, a la hora de comenzar a concurrir a un gimnasio, además de los puntos señalados, está elegir un lugar para encontrarse con el grupo social de pertenencia.
“Antes de anotarse en un gimnasio es muy importante preguntarse qué entorno me va a resultar más positivo para sentirme a gusto e ir con frecuencia. Y luego, hay que buscar un lugar que coincida con nuestros intereses”, concluyó Cruz.