INTRODUCCION:
En este estudio que a continuación se presenta, se comienza con la valoración de los conceptos de fuerza más generalizados en el entrenamiento deportivo y hasta los más actuales, continuando con las investigaciones en las ciencias aplicadas que se han realizado y en particular en la valoración de los medios y métodos de entrenamiento que proponen los estudiosos del deporte y que apoye el trabajo del pedagogo del deporte en la planificación y el control del entrenamiento del deportista.
1.1 CONCEPTOS DE LA FUERZA:
Para valorar una capacidad tan estudiada como lo es la fuerza y a la vez tan compleja es necesario comenzar por el concepto más primitivo que se conoce y que es citado por Resnick (1985) “esfuerzo que ejercemos con nuestros músculos empujando o halando algo”, en este planteamiento se aprecia que la fuerza era considerada solo la acción de realizar la contracción muscular sin tener en cuenta la magnitud de la resistencia a vencer.
En publicaciones más recientes Grosser, Starischa, Zimmerman (1988) plantean que la fuerza en el deporte es la capacidad de superar resistencias y contrarrestarlas por medio de la acción muscular, de igual forma se pronuncian (Matveev 1983, Kuznetsov 1980 y Novikov 1977, Hortman y Tuneman, 1986, Zatziorski, 1970).
Esta tendencia a conceptualizar la fuerza, donde solo se tiene en cuenta el vencimiento del peso o resistencia es contradictoria si se tiene en cuenta que vencer el peso es la causa, pero cual es el efecto que esta produce en el organismo. Para realizar un análisis más detallado de este aspecto se pasara a valorar conceptos que plantean algunos autores que son de corte biológico:
Meinel, 1991, Sechnor, 1998, plantean que la fuerza es la “Capacidad del músculo de desarrollar tensiones o contracciones contra una carga que actúa simultáneamente sobre él en dos direccionescontrarias”. Es este planteamiento queda claro que la fuerza como ejercicio físico se realiza para producir modificaciones en la tención muscular y que esta provoca a su vez cambio en la estructura fisiológica de la célula muscular del deportista.
Si a este concepto le unimos el concepto físico mecánico de fuerza que es toda causa capaz de modificar el estado de reposo o de movimiento de un cuerpo, de deformarlo, bien por presión (compresión o intento de unir las moléculas) o por estiramiento o tensión (intento de separar las moléculas), o más explícitamente aquello que empuja o tira por medio de un contacto mecánico directo o por la acción de la gravedad que altera o varía el movimiento de un objeto (Luttgens y Wells, 1985). En definitiva la fuerza es la medida del resultado de la interacción de dos cuerpos, viene definida básicamente como el producto de una masa por una aceleración (f=m.a). Atendiendo a la fórmula antes descrita la fuerza puede ser mayor, si se aumenta la masa, o si se incrementa la aceleración, o lo que es lo mismo con una misma masa podemos producir diferente fuerza variando la aceleración, para lograr esta variación de la aceleración se lograría a costa del incremento de la velocidad de contracción del músculo, lo que trae como consecuencia una diferencia de tensión neuromuscular, con una activación selectiva de las células musculares.
Lo anteriormente expuesto sirve de fundamentación para que el autor valore que para este trabajo el concepto propuesto porBosco 1991, Bompa 1995, González Badillo 1997 y Naclerio Ayllón, 2002 es más actualizado y recoge de manera más concreta la realidad del trabajo de la fuerza pues plantean que es ¨una capacidad funcional que se expresa por la acción conjunta del sistema nervioso y muscular de generar tensión, lo cual constituye la forma en que el sistema neuromuscular produce fuerzas.
Pues valoran como fundamental la tensión muscular para la producción de fuerza, la diferencia en esta tensión produce la activación selectiva de las fibras musculares, la que puede ser realizada venciendo la resistencia externa a diferentes velocidades. No tener en cuenta esto, conllevaría a dirigir el entrenamiento de la fuerza sin responder a las necesidades del deporte.
Después de conocer algunos elementos teóricos sobre cómo se expresa la fuerza en la conducta motriz de los deportes de forma general es necesario proseguir con las diferentes manifestaciones de la fuerza planteadas por diversos autores.
1.2 CLASIFICACIONES DE LA FUERZA:
Varios autores clasifican la fuerza muscular en diferentes tipos o formas.
L. P. Matveev (1986), utiliza el término amplitud de fuerza propiamente dicha, aptitudes de fuerza velocidad ¨, mientras que Novikov (1977) prefiere señalar posibilidades de fuerza, capacidades de fuerza y fuerza muscular ¨.
Peter J. L Thompson (1999) definió como ¨ fuerza máxima, resistencia de fuerza y fuerza elástica ¨.
Etzelten 1972, Harre 1976, Martín 1977, Frey 1977, Grosser 1985 y Forteza 1988 la clasifican en fuerza máxima, fuerza velocidad, y fuerza resistencia.
Como se aprecia casi todos los autores citados, fundamentalmente valoran 3 direcciones o clasificaciones de la fuerza y que son las más conocidas por los especialistas del deporte y aunque el autor coincide en que son la base de todas las demás clasificaciones hay algunas que se vinculan más a la realidad del entrenamiento y que difieren de estas en que tienen subclasificaciones que están en relación con el efecto que provoca en el organismo el trabajo de fuerza.
Hay otra clasificación que los autores le llaman tipos de fuerza y que esta en relación con la acción natural del músculo cuando se activa, que es la de acortarse por la formación de puentes cruzados de acto-miosina, pero por la circunstancia y relación con las resistencias externas, así como con la mecánica de la acción a realizar, la actividad muscular puede manifestarse de diversas maneras:
Dinámica:
La masa muscular genera tensión y se observa desplazamiento, con acercamiento o alejamiento de los puntos de origen e inserción muscular (hay movimiento de los segmentos óseos, y modificación del o los ángulos articulares implicados en el gesto). Dentro de esta se distinguen los siguientes subtipos de tensiones dinámicas:
Dinámicas concéntricas:
Se producen cuando el músculo se acorta y el nivel de fuerza interna supera al de fuerza externa.
Dinámicas excéntricas:
Se producen cuando el músculo se alarga y el nivel de fuerza interna es inferior al de la externa.
Estáticas o isométricas:
La masa muscular genera tensión pero no se observa movimiento externo aparente, aunque sí lo hay a escala interna, ya que lo único que permanece relativamente estático es el o los ángulos articulares implicados en el gesto, pero hay acortamiento de las fibras musculares y de los elementos intrasarcoméricos que es compensado por los sistemas elásticos intramiofibrilares, y los tendones de los músculos implicados, de modo que el largo muscular y especialmente los ángulos articulares, no se modifican significativamente, aunque la tensión muscular aumenta, trasmitiendo fuerza y generando trabajo ya que hay un gasto de energía acorde con el nivel de esfuerzo producido.
Estas formas de generar tensión y expresar fuerza van a determinar el llamado régimen de trabajo muscular, de modo que cuando se produce un acortamiento, habrá un achicamiento de los sarcómeros y la tensión crecerá al nivel de los tendones, ya que hay un efecto de tracción, generado desde las uniones actomiosínicas que se trasmiten desde los sarcómeros a través de las diferentes proteínas contráctiles elásticas y estructuras de las miofibrillas, que componen las fibras musculares, hacia las diversas capas de tejido conectivo y hasta los huesos por medio de los tendones.
Esta transmisión de fuerza también se produce durante los regímenes excéntricos, pues el músculo intentará siempre acortarse; pero en este caso será superado por las fuerzas externas que actúan sobre él, siendo el nivel de fuerza trasmitida a los tendones y huesos determinado por la magnitud de la carga y la cantidad de fuerza producida por la masa muscular actuante, del mismo modo ante un régimen de trabajo muscular estático también el músculo intentará acortarse, pero el nivel de fuerza aplicada no será suficiente para inducir movimiento a la resistencia, por lo que no habrá desplazamiento externo, aunque sí generación de tensión y transmisión de fuerza hacia los tendones y segmentos óseos.
Este concepto recoge los elementos más importantes y valora de manera más integrada la acción mecánica que se produce y la respuesta biológica del organismo.
Clasificación de las direcciones de Fuerza:
FUERZA MÁXIMA:
A este tipo de fuerza algunos autores como Novikov (1977), Matveev (1984), Harre (1973) y Forteza (1988) lo denominan como fuerza propiamente dicha, la fuerza máxima se define como fuerza superior que puede ejecutar un grupo muscular con una máxima oposición. Este tipo de esfuerzo se da a través de una contracción voluntaria.
La fuerza máxima supone las posibilidades que el deportista puede demostrar durante una contracción muscular voluntaria Platonov (1995), este autor plantea que la fuerza máxima del ser humano no debe ser identificada con la fuerza absoluta, que refleja las posibilidades de reserva del sistema neuromuscular. Dichas posibilidades no pueden manifestarse totalmente incluso con una estimulación máxima voluntaria, sino que solamente lo pueden hacer en condiciones de acciones externas especiales (extensión de la musculatura totalmente contraída.)
Ortiz Cervera (1996), la define como la capacidad que tiene el aparato neuromuscular y músculo esquelético de generar la máxima tensión posible sin tener en cuenta el tiempo que dure esta tensión.
Fuerza máxima (voluntaria) algunos autores la definen como el nivel de fuerza absoluto que puede producirse en forma voluntaria, y se relaciona con la mayor cantidad de tensión factible de producir a través del régimen de trabajo muscular ejecutado excéntrico, estático o concéntrico.
El profesor Rodrigo Villamagna (2002) plantea que la fuerza máxima es la fuerza más alta que un individuo puede ejercer durante una contracción voluntaria, y la divide al igual que Frey en estática y dinámica.
Cuando se habla del vencimiento de una máxima oposición lógicamente se enmarca en la oposición a pesos, cargas externas como son las pesas e implementos de todo tipo (tensores, balas, discos, el peso de un compañero, entre otros) y el mantenimiento estático de una resistencia dada. De ahí que Frey (1977) y J. Mora Vicente (1995) la dividan en fuerza máxima estática y dinámica teniendo que:Fuerza máxima estática: Es la mayor fuerza que el sistema neuromuscular puede ejercer con una contracción voluntaria contra una resistencia insuperable.
Fuerza máxima dinámica:
Es la mayor fuerza que puede realizar el sistema neuromuscular con una contracción voluntaria en la ejecución de un movimiento gestual.
Es importante señalar con el concepto antes expresado sobre fuerza máxima estática, el autor no coincide pues las magnitudes han de igualarse en la fuerza estática y no pueden ser superiores, ya que si esto sucede se produce una fuerza tipo dinámica con el sentido y dirección del movimiento de la superior pudiendo ser excéntrica o concéntrica.
Ungerer (1970) señala que la fuerza máxima estática, siempre será superior a la fuerza máxima y puede desarrollarse si la carga, (carga límite) y la fuerza de contracción se equilibra.
Fuerza rápida o fuerza velocidad:
“Constituye la capacidad del aparato neuromuscular para la movilización en un corto lapso de tiempo las posibilidades de fuerza” (Bowers y Fox 1995) o la de “superar resistencias externas con una velocidad máxima de contracción”. Aquí juega un papel destacado la clasificación de las fuerzas, atendiendo a los planos musculares que participan, ya que un deportista puede tener una fuerza rápida local en un plano y en otros no.
La fuerza - velocidad como la define el profesor Vladimir N. Platonov (1995) es la capacidad del sistema neuromuscular de movilizar el potencial funcional para lograr altos índices de fuerza en el tiempo más breve posible. Esta fuerza demostrada en condiciones de notable resistencia suele ser caracterizada como fuerza explosiva, mientras la fuerza ejercida contra una resistencia pequeña o media con una gran velocidad inicial se conoce como fuerza de salida.
Armando Forteza (1997), Stelvio Beraldo y Claudio Polleti (1992), plantean que la fuerza velocidad es la capacidad del sistema neuromuscular para superar la resistencia con una elevada rapidez de contracción.
Naclerio, (2002), Bompa, (2001) plantean que la fuerza rápida se relaciona con la posibilidad de desarrollar altos valores de tensión muscular en el menor tiempo posible, esta fuerza la dividen en varias direcciones o subdirecciones:
Rápida potencia se expresa al aplicar niveles máximos de fuerza en el menor tiempo posible ante resistencias relativamente altas de más de un 55%-60% hasta un 80% del peso máximo movilizado en un test de una máxima repetición.
RÁPIDA EXPLOSIVA:
Grosser (1985)." La fuerza que funciona en un tiempo más breve”, o Forteza (1988), que la señala, “esta se manifiesta al demostrar una magnitud de fuerza en el menor tiempo posible”.
Kuznetsov (1990) se refiere a la fuerza explosiva y dice que se revela ante el vencimiento de resistencias que no alcanzan las magnitudes límites, con máxima aceleración.
Esta forma de manifestarse la fuerza está estrictamente vinculada con la velocidad de los movimientos aislados, o sea, que determina en gran medida, el rendimiento en los movimientos que exigen una gran velocidad inicial. Buhrle, Shmitblekher (1981).
La fuerza rápida explosiva se expresa al aplicar niveles máximos de fuerza en el menor tiempo posible (newton*seg.) ante resistencias relativamente bajas aproximadamente un 30-40 % al 55 % del peso máximo movilizado en un test de una máxima repetición. (Naclerio, 2002, Bompa, 2001)
Resistencia a la fuerza:
Es la capacidad de resistir los estados de cansancio que posee el organismo durante ejercicios de fuerza, esfuerzos tanto internos como externos, prolongados o repetidos.
“La base fundamental de la fuerza resistencia va a estar determinada por el desarrollo de la fuerza máxima y la resistencia general” Grosser (1985).
Autores como Platonov (1995), plantean la fuerza - resistencia como la capacidad de mantener índices de fuerza medianamente altos, durante el mayor tiempo posible. Villamagna (2002), la define como la capacidad de oponerse a la fatiga, en rendimientos de fuerza prolongados o repetitivos. El nivel de esta fuerza se traduce por la capacidad del deportista para vencer la fatiga, realizar una gran cantidad de repeticiones de los movimientos o una aplicación prolongada de fuerza en condiciones de contraposición a una resistencia externa.
Forteza (1997), Iván Román (1998) hacen referencia a la fuerza resistencia y dice que es la capacidad que tiene el organismo de superar la fatiga durante el trabajo de fuerza.
Resistencia a la fuerza:
La resistencia a la fuerzase relaciona con la habilidad de sostener un nivel de fuerza requerido por el mayor tiempo posible, vinculado a un rendimiento específico, de modo que los niveles de tensión no se reduzcan significativamente como para perjudicar elrendimiento. (Naclerio, 2002, Bompa, 2001).
Dentro de estas formas básicas de expresar la fuerza muscular, surgen diversas subdirecciones que dependen de factores como la magnitud de la resistencia a vencer, la técnica de movimiento, entre otros.
Al ejercer una acción muscular sobre cuerpos o resistencias externas estas sufren cambios directamente proporcionales a la magnitud de la “fuerza aplicada” durante el espacio y tiempo, en el cual se ejerce dicha fuerza, es decir, que cuando se trasmite fuerza por medio de la masa muscular a una pesa (cuerpo “no fijo”, con una masa constante) esta sufrirá una aceleración directamente proporcional a la fuerza que se le ha aplicado, pudiendo adquirir un movimiento en la misma dirección de la fuerza aplicada y alcanzando una velocidad dentro del mismo espacio recorrido, rango de movimiento articular que será proporcional a la magnitud de la fuerza aplicada. (Bompa, (2003), Badillo, Bosco citados por Naclerio)
1.3 PRINCIPIOS:
En su libro Fisiología del Deporte, los profesores (Richard W. Bowers y Edward L. Fox 1995), plantean que existen cuatro principios que deben conformar la base de la mayor parte de los programas de resistencia con pesas, así como los principios que deben cumplirse para el entrenamiento, ellos son:
Principio de la sobrecarga:
La fuerza muscular se desarrolla de manera más efectiva cuando el músculo está sobrecargado, es decir, que cuando se le ejercita contra una resistencia que excede a aquellos con los que normalmente trabaja. El uso de resistencia que sobrecarguen al músculo estimula las adaptaciones fisiológicas que conducen a un aumento de la fuerza muscular.
Principio de la resistencia progresiva:
Dado que un músculo sobrecargado gana fuerza durante el curso de un programa de entrenamiento con pesas, en algún momento posterior del programa la carga inicial (resistencia) ya no resultará adecuada para continuar ganando fuerza. En otras palabras, a medida que se adquiere fuerza la sobrecarga inicial puede convertirse en sub. - carga. Por esta razón, la resistencia contra la cual se ejercita el músculo debe incrementarse de forma periódica durante todo el entrenamiento.
Principio del ordenamiento de los ejercicios:
Los programas de entrenamiento deben ordenarse de tal manera que dos ejercicios no involucren el mismo grupo muscular. Esto asegura un tiempo adecuado de recuperación después de cada levantamiento.
Principio de la especificidad:
Los programas de entrenamiento con pesas son específicos en diversos sentidos. El desarrollo de la fuerza es específico, no solo para los grupos de músculos que se ejercitan sino también para los patrones de movimientos que ellos producen. Es decir, el entrenamiento de resistencia con pesas parece ser una actividad específica de las aptitudes motoras.